Archivo mensual: septiembre 2010

David Morrell – Rambo

Hola, ofidios.

Ésta es la última de las reseñas que tenía pendientes, y para tratarse de la última hay que decir que habla de un libro que me ha dejado un muy grato sabor de boca.

De entrada he que decir que el personaje de Rambo (el conocido ya casi universalmente gracias a la pantalla grande) sólo me gusta en la primera película, y éste es el libro en el que se basa. Y, como suele suceder, el libro le de cien mil vueltas a la película: de hecho casi parece otra historia, mucho más intensa, dura y triste.

El libro que nos brinda David Morrell, de lectura muy rápida, te sumerge en unos personajes penosos, patéticos, tanto por sus soledad como por la manera que enfrentan el futuro. Rambo, una víctima inadaptada que en la novela se nos muestra como un máquina de matar mucho más letal que en el filme, un chaval de poco más de veinte años convertido en un monstruo; Teasle, un personaje mucho mejor dibujado en la novela, un desafortunado incapaz de superar una crisis familiar. Ambos personajes se enfrentan defendiendo sus ideas, cada uno tratando de llevar al otro a su camino: el primero con su actitud solitaria y libre, tratando de ‘demostrar’ su libertad; el segundo intentando doblegar al salvaje que irrumpe en su territorio, lo único que le queda como suyo. Entre medias, la naturaleza de una región que engaña al lugareño y que ayuda al forastero oponiendo los roles de cazador y presa.

Magnífica lectura, de la que se hubiera sacado una película mucho mejor de no ser, sin duda, por el ansia de los productores. Este Rambo se merece un indudable ocho.

Chau.

Robert C. Wilson – Darwinia

Hola, culebras.

Darwinia es el primer libro que leo del autor, Robert C. Wilson, y sin duda me ha dejado una sabor agridulce… o mejor dicho ‘dulceagrio’. Me explico: la novela empieza bastante bien, con un escenario y unos acontecimientos puramente lovecraftianos. El primer desembarco supone un claro ejemplo de ello. Esa atmósfera se intensifica en la expedición al interior de la selva, un relato cuya relación con Las montañas de la locura resulta poco menos irrefutable, e incluso me atrevería de decir que bebe también algo de El que susurra en la oscuridad. La tensión y el sentido de la maravilla emulando el espíritu del escritor de Providence queda plasmado de nuevo sin lugar a dudas cuando se adentran en lo que encuentran en el corazón de la selva (no quiero destripar esa parte de la novela, así que no lo digo).

Por desgracia esa tensión, ese buena impresión que deja la lectura se evaporan de una manera brutal y sin sentido cuando el propio autor mete un spoiler brutal del entorno en el que se sumerge la novela (y con un poco de imaginación también de los hechos futuros que van a suceder). Ese spoiler, colocado a modo de inapropiada explicación a eso de un tercio de la novela, hace que ésta pierda buena parte de su interés, si no todo. Su naturaleza es tal que en mi caso me dieron ganas de lanzar el libro directamente a la basura: lo que dice me dejó bien claro que nada de lo que sucediera en las siguientes páginas tendría un interés real.A medida que se avanza en la lectura, y gracias a ese spoiler, la historia pierde gancho, diluyéndose en una ridícula y patética lucha bien/mal, llena de un pseudo misticismo que la propia naturaleza de lo que habla el spoiler anula.

Llegados al final de la novela ya da igual quien gane ni o que se diga, porque todo ello realmente no afecta a nada real.

En definitiva, me encuentro ante un libro que defrauda, y como tal se merece un simple (y puede que magnánimo) cuatro.

Adiós.

Un regreso lento, muy lento

Hola, ofidios.

Han transcurrido muchos meses de silencio, una situación obligada por una baja médica que me ha impedido escribir, y de la que no me he recuperado del todo… pero es que aun con las manos doloridas y con pinchazos he de poner algo aquí, en la web. ¿El qué? Pues lo lógico: han sido meses alejado de un ordenador, de un teclado, pero de igual manera meses practicando mi vicio favorito: leer libros y más libros.

Así que ahora, medio recuperado, voy a ir aportando poco a poco las pequeñas reseñas de lo leído. Aunque una vez publicadas no las lea ni dios dado que Google me sigue teniendo baneado, me da  igual: lo hago para mí, para mi satisfacción, y para mi memoria. Y eso me parece ya bastante.

En los próximos días iré colgando, con fecha modificada para que perezca la auténtica de finalización de lectura, lo que me han parecido los libros. Así de entrada veo, repasando las fechas, que en general he aumentado mi velocidad de lectura: más obras, más personajes, más historias, más mundos. Más. Y sin duda para mí eso significa mejor. Ya que no puedo escribir, ya que me resulta imposible plasmar los mundos e historias que se me acumulan dentro de la cabeza (sin duda mi mayor maldición), al menos trato de evadirme leyendo las de otros.

Bueno. En breve la siguiente (aunque con fecha antigua) entrada, la próxima reseña.

Hasta entonces, un saludo.

PD: Se me olvidaba decir que la última reseña no ‘trucada’ era la de la saga de los Aznar 3, del 22/3/2010.